CUANDO UN PEÓN CORONA, PUEDE SER REINA - Por Eduardo Ramos Campagnolo -

¿ Méritos y fracasos o simplemente azar? ¿O tal vez una combinación sumamente compleja de ambos? 

Contentos y frustrados, todos alguna vez nos formulado las preguntas de rigor: ¿ Tenemos a la esposa, esposo, pareja que nos merecemos? ¿Hemos logrado obtener el título universitario soñado? ¿Contamos con  la consideración y el respeto de nuestros pares que creemos merecer? Y así podríamos continuar con una serie de interrogantes. Generalmente atribuiremos nuestros éxitos a nuestras capacidades naturales o adquiridas y nuestros fracasos al azar. "Tengo el nivel económico y social que he logrado porque trabajé arduamente y mis aciertos fueron producto de mi inteligencia" dicen varios; " No logré mis objetivos debido a circunstancias ajenas a mí que me lo impidieron", dicen también varios. 

 Somos realizados o somos frustrados, así nos sentimos, solo algunos aceptan que tuvieron éxitos y fracasos. Pero nadie entiende que, colocados en la balanza éxitos y fracasos, un solo éxito puede valer mucho más que decenas de fracasos. también está la posibilidad inversa. En este pesebre descansa nuestra frustración o nuestro éxito.  Cuanto influye el mérito: la constancia, el esfuerzo del largo plazo, las virtudes y cuanto influye la  herencia, el azar, Dios o las circunstancias cuando se conjugan, los astros cuando se alinean.

En una sociedad vertiginosamente consumista piramidalmente globalizada-podría decir mentirosamente globalizada- integrada por ciudadanos siempre disconformes, cuando no ambiciosos y ambiciosos desmedidos; son muy pocos los que sin ser conformistas, agradecen lo que tienen y no apetecen los bienes ajenos. Revisemos lo que tenemos, seguramente encontraremos o nos re-encontraremos con entelequias a las que nunca hemos valorado y tal vez solo una de ellas, al comprender su magnitud, nos lleve a olvidar absolutamente todos nuestros fracasos...revisemos.